Las Palmas de Gran Canaria, 11 de noviembre de 2024 - El Cabildo de Gran Canaria y el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria han escenificado hoy su rechazo frontal al proyecto de construcción de una planta de gas licuado en el Puerto de La Luz, anunciando que presentarán una moción conjunta en los plenos de ambas instituciones para frenar esta iniciativa.
En una comparecencia pública desde la marquesina del paseo marítimo de Santa Catalina, el presidente del Cabildo, Antonio Morales, ha calificado el proyecto como "un engaño", asegurando que lo que inicialmente se presentó como una instalación para suministrar energía a barcos atracados se ha convertido en "un intento de introducir más energías fósiles en la isla por la puerta de atrás".
Por su parte, la alcaldesa Carolina Darias ha sido tajante al afirmar que "la ciudad no necesita unas instalaciones como esta, que supone importantes riesgos para la salud de nuestra ciudadanía". Ambos dirigentes han destacado que el proyecto, impulsado por Totisa Holdings, contradice los esfuerzos por hacer de Las Palmas una ciudad más sostenible.
Las dos instituciones instan a la Dirección General de Energía del Gobierno de Canarias a "desestimar la autorización administrativa del proyecto". Según los informes del Consejo Insular de la Energía, la planta podría aumentar "hasta 12 veces" las emisiones de dióxido de carbono, además de generar fugas de metano.
En respuesta, la presidenta de la Autoridad Portuaria, Beatriz Calzada, ha manifestado su sorpresa por "la beligerancia" con la que se está tratando el tema, recordando que el proyecto fue aprobado en 2019 por un consejo de administración en el que participaban representantes de ambas instituciones. Calzada ha defendido que el proyecto aún está en fase de evaluación ambiental y ha pedido "respeto con los procedimientos, los trabajos técnicos y los tiempos".
El enfrentamiento institucional pone de manifiesto la controversia sobre el futuro energético de la isla, entre quienes defienden la necesidad de infraestructuras para garantizar el suministro al puerto y quienes apuestan por alternativas más sostenibles.