10/08/2024
Juan Antonio Peña (Telde, 1986) gobierna su ciudad natal como alcalde desde el 17 de junio del pasado año, cuando con el apoyo de Ciudadanos para el Cambio -CIUCA-, Partido Popular, Juntos Por Telde (Coalición Canaria - Coalición de Centro Democrático) y Más Por Telde. Entonces, el cabeza de lista de CIUCA recibió el apoyo de 16 de los 27 concejales que conforman el Salón de Plenos teldense, aunque por el camino dos de los ediles de CC, Héctor Suárez y Pilar Mesa, fueron cesados del grupo de gobierno y forman parte actualmente de la oposición. Con una mayoría absoluta más justa, Peña repasa para ACFI PRESS, el poco más de un año que lleva como alcalde de su ciudad.
P.- ¿Qué balance hace después de un año al frente del Ayuntamiento de Telde?
R.- Como primer año de gobierno de la Ciudad de Telde ha sido un buen año. Por lo menos lo percibe este gobierno y también la ciudad. A nosotros nos ha servido para saber a lo que nos vamos enfrentando en cada periodo del año y también para seguir con nuestros principios que es estar en la calle. Eso ha dado como resultado el entusiasmo que existe hoy en día en la ciudadanía. Yo creo que a nadie se le puede negar que Telde está viviendo un momento positivo en el que se habla bien de la ciudad, que se está proyectando fuera de este territorio ese buen nombre y que esa ilusión y ese entusiasmo cada vez se va contagiando más y que los ciudadanos ven que esto va en serio, que el cambio viene para quedarse y que estamos actuando en base a aquello que dijimos. Ha sido un año que se ha pasado rapidísimo, pero hemos conseguido hitos importantes.
P.- ¿Cuáles sería los que más destacaría?
R.- El primero, la bajada del IBI, que ya se empezaron a emitir los recibos y lo han dicho los propios ciudadanos. Cuando otros gobiernos lo hacen de cara a las elecciones en el último año nosotros lo hicimos nada más llegar, fue una de las primeras medidas. Al igual que la eliminación del impuesto a los vehículos de más de 25 años. Hemos quitado la cita previa, eso era impensable cuando nosotros llegábamos. Teníamos listas de espera de cuatro meses para un certificado, para un empadronamiento. Hoy cualquier ciudadano puede ir a su administración sin cita previa, para cualquier trámite, pero para hablar con un trabajador municipal, con su alcalde o concejales. No existe la cita previa. Seguimos siendo accesibles. Los ciudadanos pueden encontrarnos en la calle principalmente, pero también en el Ayuntamiento. Acuden y saben que se van a encontrar al alcalde o a sus concejales. Hemos hecho la mayor inversión en estos presupuestos en servicios sociales. Nos vamos a 6 millones de euros, el presupuesto más social de toda la historia de esta ciudad de Telde. También en protección animal, un millón de euros para el bienestar animal. Vamos a tener nuestro propio centro de bienestar animal y el mayor plan de asfaltado también de la ciudad. Yo creo que el principal problema, y es una realidad que tiene Telde, es el asfaltado. Nos vamos a ir a un plan de asfaltado que en un año aproximadamente se hará 300 calles. El anterior mandato hizo 200 calles en ocho años. Nosotros en el primer año nos vamos a ir a 300. Eso significa que vamos a invertir en lo que hace falta.
P.- ¿Les ha servido haber visto antes los problemas desde la oposición?
R.- Yo creo que es un año desde la llegada, de ver la realidad de este Ayuntamiento y de esta ciudad. La conocíamos cuando estábamos en la oposición y ahora es ponerlo en práctica. Ya no tenemos excusa y hay que continuar adelante en ese Telde que nosotros siempre predicamos, sin mirar al pasado, sin poner retrovisores, gobernar para toda la ciudad y sobre todo demostrar que esto va en serio y que las expectativas que tenían los ciudadanos que votaron ese cambio, pues que es una realidad. Yo creo que en esa responsabilidad estamos todo el gobierno y sobre todo en la unidad, que somos cuatro partidos políticos, CIUCA, Partido Popular, Más por Telde y Coalición Canaria y esa unidad se manifiesta en la calle y es el resultado del trabajo también. A veces los ciudadanos dicen, pero ¿cómo hemos tardado tantos años y ahora en poco tiempo hemos resuelto este problema? Pues porque somos un equipo. Ya vendrán las elecciones de cada uno a vender lo que ha hecho y sus siglas y su partido, pero a día de hoy seguimos funcionando y que sea así durante los cuatro años como un solo equipo.
P.- ¿Puede ser la ruptura con Héctor Suárez el momento más complejo de este año?
No ha sido difícil, no fue difícil esa situación. Yo creo que lo más difícil es cuando alguien toca la puerta de este Ayuntamiento que tiene una necesidad y no poder responderle porque la administración no tiene las herramientas o porque el proceso administrativo va mucho más allá. A lo mejor un caso de que sea un desahucio, alguien que no tiene vivienda, una ayuda social, alguien que no pueda tener el agua, alguien que tenga problemas con los suministros. Yo creo que eso es lo más difícil. El cesar a Héctor Suárez y ahora dentro de poco un año, yo creo que ha sido una decisión acertada y el tiempo lo ha dicho y el tiempo lo dirá. La decisión hasta el momento más aplaudida por la ciudadanía, que más mensajes recibí, que nadie me cuestionó y que evidentemente otros no la hubiesen hecho. Preferían callar y aguantar antes de tomar una decisión. Algunos me dijeron en ese momento ¿y cómo te atreves a cesar a un concejal? Después a su compañera, es decir, he cesado a dos concejales, a sabiendas que te puedes quedar en minoría, a sabiendas que te puedan hacer una moción de censura y mi respuesta fue clara. Los ciudadanos nos han votado para tomar decisiones, acertadas o equivocadas. No podemos estar de brazos cruzados ni siendo cómplices de cualquier irregularidad. Yo no le puedo explicar a un ciudadano que no le puede buscar un puesto de trabajo y otro dedicándose a enchufar a los suyos, porque es un mal ejemplo y eso no votó la ciudadanía.
P.- Casi un año después de esa decisión, ¿la ve acertada?
R.- Fue arriesgada, asumo las consecuencias, hasta el momento han sido todas positivas y lo volvería a hacer. No me arrepiento y durante este tiempo que esté como alcalde, estos señores no tendrán ni cabida ni necesidad de estar en el gobierno. Yo creo que la ciudadanía, cuando lleguen las elecciones, harán esa reflexión democrática que es el mayor examen que tenemos nosotros, tanto a ellos como a nosotros, y sabremos si nos hemos equivocado o hemos acertado. Pero yo creo que era una decisión que tenía que tomar, un aviso a navegantes, que esto va en serio y también lo he hecho con cargos de confianza, con personal municipal, con cargos directivos de empresas públicas y con todo aquello. Yo creo que a nadie se le esconde que cuando no se hacen bien las cosas el alcalde cesa. Y también está ahí la historia para decir que he sido el alcalde que en menos tiempo ha cesado a tanta gente y eso significa que no soy cómplice de nada ni de nadie. Por lo tanto este gobierno no lo es. Tengo unos compañeros fantásticos, estos 15 hombres y mujeres, que velan por la legalidad, que son hombres serios, mujeres serias, y si algún día se cambian de tercio o las cosas no van, van a tener las mismas consecuencias. No les veo porque este año me ha servido para conocerlos, pero sí es verdad que esa decisión fue acertada y la volvería a hacer con todas las consecuencias. Y vuelvo y repito, el tiempo nos ha dado la razón.
P.- ¿Pondría la mano en el fuego para asegurar que este pacto llegará hasta el final del mandato?
R.- Yo pongo la mano en el fuego por mí. Es decir, por las cuestiones que llevo yo en primera persona. Cuando alguien me dice ¿qué fecha estimas que esto se pueda resolver? Si depende de mí, yo me atrevo a decir una fecha. Yo no pongo la mano en el fuego absolutamente por nadie. ¿Por qué no? Porque no es así. Yo creo que cada uno se conoce y hay que diferenciar dos esferas importantes. Una es la personal y otra cosa es lo político. Se tienen que unir las dos cosas para que funcione. Yo creo que hay que ser buena persona y ser buen político, o por lo menos intentarlo. Es verdad que a veces nos encontramos a buenas personas y después no tienen esa capacidad o esa altura de ejercerlo en lo político. O al revés, las malas personas y las malas políticas. Por lo tanto, esa combinación es perfecta. Yo respondo por mí. Mi deseo, me gustaría evidentemente continuar porque creo que tengo un buen equipo y que podemos hacer cosas por la ciudad. Y si hacemos lectura de esas elecciones, los que están en el gobierno son o los que se mantuvieron en votos o los que subieron en votos. Y en la oposición están aquellos que perdieron votos o que la ciudadanía castigó al gobierno anterior. Por lo tanto, yo creo que si le hacemos caso al mandato de la ciudadanía, estamos colocados cada uno en su sitio y con su proporción y con sus distribuciones de cara al gobierno. Por lo tanto, yo creo que es el mejor camino, la unidad, si queremos lo mejor para Telde. Si queremos lo mejor para cuestiones personales o partidistas, evidentemente estamos hablando de otro tipo de proyectos. Yo solamente hablo de equipo y de buen gobierno, que yo creo que es el que está y el que durará estos cuatro años.
P.- Después de un año al frente del Ayuntamiento, ¿cuál es su principal preocupación en la actualidad?
R.- El no tener respuesta para la vivienda. Raro es el día que nos reciba alguien con un problema de vivienda, a sabiendas que la competencia la tiene el gobierno de Canarias y que son ellos los que construyen y los que adjudican. El Ayuntamiento de Telde ya ha ofrecido terrenos para construcciones en esta ciudad por parte del Gobierno de Canarias. Canarias tiene un problema importante de viviendas y no se ha dado respuesta desde hace muchísimos años. Yo no estoy echando culpa a los que están ahora ni a los que estuvieron los últimos cuatro años. De manera histórica, se ha dejado de construir o de adjudicar correctamente el tema de la vivienda. Por lo tanto, yo creo que la vivienda es un tema que preocupa y que todas las instituciones tenemos que remar para solucionar. También me preocupa el tema social, evidentemente, y a partir de ahí, los servicios básicos. Y dentro de esos servicios esenciales, yo creo que el peor que está en esta ciudad de Telde es el asfaltado. Hay otros servicios que se han mejorado y lo perciben los ciudadanos, como puede ser la limpieza o los parques y jardines, pero tenemos que seguir mejorando.
P.- Insiste mucho en los problemas de asfaltado, ¿qué ocurre?
R.- Estamos hablando de una ciudad, de una gran ciudad, de 107.000 habitantes y que tiene que tener los servicios a la altura. Muchos años de abandono no se resuelven en un año. Sacar a concurso público y adjudicar 300 carreteras no se dice fácil. Hemos aguantado un año el chaparrón, pero es que partimos de cero. Yo no tengo una empresa de rebacheo que pueda ir a tapar un bache con asfalto. Tenemos que utilizar cemento. No hemos tenido un contrato de asfaltado en el que podamos ir incorporando carreteras. Hemos tenido que empezar, porque era lo mismo contratar una empresa de rebacheo que asfaltar calles. Y al final lo que íbamos a hacer es lo que se ha hecho de aquí para atrás. Por lo tanto, hemos aguantado este año. Está a punto ya, yo creo que está adjudicado, falta la dirección de obra, empezar con el asfaltado. Y una vez que se empiece el asfaltado, aquí no se va a parar de asfaltar hasta que esté todo Telde completo, no vamos a hacer divisiones de barrios. Detrás de esos socavones no está el coche que se estropea o la persona que va a trabajar a su casa y se acuerda del alcalde y de los concejales cada vez que coge un bache. Estamos hablando de personas que van en ambulancia, de personas que no pueden acceder porque usan el transporte público y se niega un taxista a entrar con toda la razón del mundo. Estamos hablando de personas que tienen problemas de operaciones o cualquier cosa que tienen que coger un bache. Estamos hablando de una cuestión seria. Asumo la responsabilidad, no le he hecho culpa absolutamente a nadie. Nos toca resolverlo y estamos caminando a resolver. Y espero que ya, antes de acabar el año, pues estemos asfaltando y que se vean esas máquinas tan deseadas en esta ciudad de Telde.
P.- Volviendo a la situación de la vivienda, comentaba que había ofrecido suelo al Gobierno de Canarias. ¿Se ha llegado a algún tipo de acuerdo para construir?
R.- Sí, se han iniciado los trámites. Vamos a cederle todo lo que sea suelo público por parte de este Ayuntamiento de Telde. Le hemos puesto a disposición bolsas de suelo. Hay otras que ya están caminando administrativamente o que el propio Gobierno de Canarias se ha interesado por esas bolsas de suelo y lo vamos a hacer. Todo lo que sea municipal, público, nosotros no queremos terrenos ni propiedades para estar abandonados o para que sean síntomas del vandalismo o de la dejadez. Tenemos que ponerle a disposición de aquellas instituciones que realmente vayan a construir o vayan a realizar recursos a favor de los ciudadanos. Por lo tanto, ¿para qué queremos terrenos, baldíos que no están haciendo absolutamente nada y lo ponemos a disposición de un cabildo gobierno de Canarias para la construcción de viviendas o de cualquier otra infraestructura? Por lo tanto, nosotros vamos a hacer toda la tramitación y agilizar todos los trámites oportunos para dejarles esos terrenos y que ellos puedan construir también. Es verdad que cederlos para después tenerlos ahí encapsulados, como nos ha pasado a lo largo de la historia, no con el tema de la vivienda, sino con otras cuestiones, y no poder desarrollarse, yo creo que sería un trabajo en balde. Por lo tanto, tiene que existir un compromiso que se va a ejecutar y por nuestra parte le trasladamos todas esas propiedades o esos bienes municipales.
P.- Pocos alcaldes mantienen una agenda con vecinos como la que usted tiene. ¿Qué le suelen trasladar, le sirve de mucho?
R.- Sirve absolutamente de todo. Cuando estaba en la oposición, yo daba mi número de teléfono y lo daba en todos los medios de comunicación y me decían, bueno, eso lo dices ahora porque eres oposición, deja que seas alcalde. Yo he renunciado al teléfono del Ayuntamiento, sigo teniendo el mismo desde que tengo 15 años, el mismo número. Es un teléfono público, está en mis redes sociales, está en la página web del Ayuntamiento de Telde. Respondo a todos los mensajes. Estamos sentados en esta entrevista y no suena ninguna llamada. Eso significa que la gente es muy respetuosa o utiliza los horarios o utiliza el WhatsApp o cualquier otro mecanismo. Me sirve para contactar con la realidad. Los despachos endiosan y nos alejan de la realidad. Los compañeros a veces te endiosan porque solamente te comunican lo que quieres escuchar, lo bien que lo estás haciendo. El contacto con la calle es el contacto con la crítica constructiva, la que te va avisando cuando las cosas se están haciendo mal. Por lo tanto, ser disponible es una ventaja. Yo me siento hoy aquí en esta entrevista sin tener a un solo ciudadano esperando para hablar con su alcalde.
P.- Pero Telde tiene muchos ciudadanos....
R.- Estamos hablando de una ciudad de 107.000 habitantes. No tengo agenda. Llego todos los días al Ayuntamiento a las 7 de la mañana junto con los trabajadores municipales. Publico mi agenda en la página web y en las redes sociales. Significa que el ciudadano sabe dónde estoy en cada momento. Hoy llegaba y me encontraba a dos personas y me decían "como usted puso en la agenda que a las 7 de la mañana iba a atender al ciudadano...", se presentaron sin cita previa y yo los atendí. Eso es una clave de cercanía, de no endiosarnos, vuelvo y repito, de estar en contacto con la realidad, de resolver y sobre todo de escuchar. Existe una falta de escucha importantísima. Ojalá pudiera resolver todos los problemas que tienen los ciudadanos, pero me he dado cuenta de que muchas veces ha sido falta de atención y falta de escucha. Y escuchando, por lo menos le decimos la verdad, que a lo mejor no es lo que esperaban escuchar, pero saben que no le estás mintiendo, que pueden buscar otra vía judicial, administrativa, intentar resolverlo y no está esperando a que alguien le responda y nunca le respondió, sino por lo menos decir, mira, no tiene solución, esté aquí y quien esté no se lo va a resolver porque es una cuestión técnica o cuando tengo dudas llamar a un técnico y que venga el técnico y se lo explique. Eso es síntoma de ir con la verdad por delante y no mentirle al ciudadano.
P.- No tiene que ser fácil, ¿no?
R.- Yo creo que es el camino que tiene que tomar esta nueva generación, la regeneración política, que yo creo que se está llevando a cabo en Gran Canaria y en Canarias, en muchos municipios y de diferentes partidos políticos. Es decir, yo creo que existen perfiles en Canarias de la regeneración política y es el camino. Yo creo que tenemos que abrir puertas. El tener contacto, a veces me escriben las personas por las redes sociales, yo no tengo delegadas en las redes sociales y eso que hay redes que superan los 10.000 o 12.000 seguidores, les respondo a uno por uno. Yo no me acuesto ningún día sin dejar a la gente sin responder. A veces dudan, me dicen "¿Eres tú? ¿Eres Juan Antonio el que está al otro lado de la red?" Les tengo que mandar un audio o coger el teléfono para que vean que realmente soy yo el que les atiendo. Hay tiempo para todo y bien administrado. Esto no significa que yo no tenga tiempo para gestionar, para estar con la familia, para estar con los amigos, para estar con el ocio, con el deporte. Todo es cuestión de administrar y no perder esa esencia que yo creo que es lo que el ciudadano quiere hoy en día. Que por lo menos el político no le mienta, que esté en la calle, que le escuche, porque imagínese usted tener un problema y que encima el que te lo pueda resolver ya no te lo resuelva, sino que ni te escuche. Yo creo que eso es lo peor que nos puede pasar.
P.- ¿Qué le suelen preguntar?
R.- Los ciudadanos nos preguntan de todo y en base a esa cercanía a veces cuestiones que no son del Ayuntamiento, pero porque confían en uno y sobre todo el contacto que se ha perdido y se había perdido con aquellas personas, aquella generación que no vota. Es decir, aquellos que son menores de 18 años, parece que los políticos a veces se olvidan y solamente se centran en esas personas que votan. Telde yo creo que está experimentando algo único y es que los adolescentes, que los niños y las niñas conocen a su alcalde, conocen a su gobierno, te escriben. Es decir, yo recibo peticiones por Instagram de ¿cuándo me vas a arreglar la cancha deportiva? O ¿por qué no un restaurante de comida rápida en mi barrio? O ¿por qué no la guagua que vamos a la playa no me llega a mi barrio? Eso es hacer política, pero eso es abrirle la puerta a una generación que ha perdido la esperanza o había perdido la esperanza de estar en política. Existe mucha gente joven, válida, que a lo mejor ahora se lo están pensando. Yo siempre cuando voy a un colegio le digo entre nosotros están los futuros alcaldes y alcaldesas de esta ciudad, de esta tierra, los futuros concejales. ¿Quién sabe si el presidente del Gobierno de Canarias a futuro o la presidenta del Gobierno de España? Tenemos que animar a esa generación a formar parte de la política. La política somos todos y si dejamos que en la política no estén los buenos y no estén los preparados, yo creo que eso es lo peligroso. Por lo tanto, tenemos que facilitar el camino a la gente preparada que a veces da un paso atrás por la crítica, por la mala comprensión, por el qué dirán.
P.- ¿Ha cambiado desde que es alcalde?
R.- Yo creo que se puede estar en la política y seguir siendo uno mismo. Yo sigo vistiendo igual que cuando estaba en la oposición, sigo teniendo mi coche igual, viviendo en el mismo barrio, transitando la calle, voy solo por la calle. Es decir, sigo teniendo mi vida porque yo creo que es el temor que tenía la gente antes. Te voy a votar, pero tengo miedo a que cuando seas alcalde cambies. Los propios trabajadores municipales. Ahora vienes por aquí y me saludas, pero cuando seas alcalde no vas a pasar por aquí, vas a subir a la planta. Yo creo que estamos demostrando que somos hombres y mujeres corrientes. La vida continúa a magia de la política y esto acabará un día. Aquí no voy a ser alcalde ni concejales toda una vida. Sin embargo, lo que van a seguir siendo siempre van a ser los trabajadores municipales, los vecinos y vecinas de esta ciudad, la persona que te encuentras con su negocio y son la gente que nos vamos a encontrar en la calle de por vida, a no ser que cojas las maletas y te marches de esta tierra. Pero como tenemos ambición de seguir entelde y de seguir haciendo nuestro día a día entelde, yo creo que no existe necesidad de falsear la realidad, de falsear y ser otras personas, sino que con la naturalidad puedes continuar adelante y seguir siendo uno mismo. Y si no estamos a la altura, prefiero que cuando lleguen las elecciones digan por lo menos este pobre lo intentó, le puso ganas, le echó horas antes de que diga este es un trasto, este es un mentiroso, este es uno más, este viene a llenarse los bolsillos. Es decir, yo creo que eso es lo peor que nos puede pasar a los que nos dedicamos a la política. Yo creo que por lo menos ganas le pongo para seguir siendo la misma persona y es lo que le intento trasladar también a los compañeros que yo creo que con el tiempo me superarán y será el futuro de esta ciudad y de esta tierra".
P.- Sergio Ramos comentó en su día de la falta de efectivos policiales en el municipio y se hablaba de inseguridad. ¿Cuál es la situación real de la seguridad en el municipio?
R.- Es verdad que hacen faltas efectivos y así nos lo ha trasladado el sindicato de la Policía Nacional que se quejan de la falta de dispositivos. También es cierto que estamos en una ciudad segura. Los índices están, la delegación del gobierno nos traslada esos datos. Esto no significa que una cosa contradiga a la otra. Pueden faltar efectivos y los que están se están dejando la piel, a lo mejor más allá de sus funciones, más allá de sus horas, con esa responsabilidad. Las dos cosas son compatibles. Estamos en una ciudad segura donde hemos sufrido hechos puntuales que hay que tener en cuenta. Hay que prevenir y sobre todo trabajar. Y por eso la reunión con la Delegación del Gobierno. Se trasladaron unidades desde Las Palmas de Gran Canaria, el apoyo de la Policía Local, la Policía Canaria y tenemos que trabajar en la seguridad. Nos hemos reunido con el Gobierno de Canarias, nos preocupan algunos centros de menores. Sean cual sea el origen y los menores que estén dentro de ahí, las cosas cuando no funcionan yo creo que hay que trabajarlas y mejorarlas principalmente por los que están dentro de los centros, por el aforo, por los servicios que tienen, por los profesionales que tienen al frente, todas esas cuestiones. Y lo hemos hecho con el Gobierno de Canarias y están viendo sus frutos. Por lo tanto, estamos en una ciudad segura que puede mejorarse, evidentemente, también la responsabilidad que tiene el Ayuntamiento de Telde y este que les habla como alcalde. Tenemos que equiparar en mejores condiciones a la Policía Local, tenemos que sacar nuevas convocatorias. Ahora dentro de un mes ya tendremos a 33 nuevos agentes ya que vienen de la Academia y por lo tanto van a estar en prácticas en la ciudad y tenemos que sacar nuevas convocatorias. Y aquí no se trata de apuntar a otras instituciones y quitarnos a nosotros la responsabilidad. Tenemos responsabilidad y tenemos que trabajar para que Telde sea una ciudad segura que lo es, pero sobre todo para que el ciudadano lo sienta. No en datos, en papeles, sino que el ciudadano sienta que tiene seguridad y que sus agentes están en la calle y que visitan y que patean y que cuando les llaman responden el teléfono.
P.- Un tema que para muchos no es tan importante pero para otros sí, el de las fiestas. ¿Qué ha pasado este año en Melenara y en Lomo Magullo donde no se celebró la tradicional Traída del Agua?¿Le preocupa?
Bueno, yo creo que son dos cuestiones importantes. En Melenara igual que ha pasado en otros barrios y hace años y de manera histórica es cuando se crean diferentes colectivos. A lo mejor uno que lo lleva tiempo organizando, otro que nace uno que desaparece, otro que aparece y es complicado para la administración porque como se suele decir ¿qué hijo te tocas que no te duele? Es decir, ¿a quién le das la razón? Es muy complicado. Nosotros le hemos insistido a ambos colectivos, si hablamos de Melenara, de que se tienen que poner de acuerdo. Y ahí están las pruebas, no solamente en las reuniones de manera individual, sino por escrito. Y desde el pasado año se lo hemos trasladado. Al principio de año, en mayo, se lo hicimos por escrito. Por favor, pónganse de acuerdo. Si hay fiestas, para todos. Que si no se quieren unir, pues que deleguen. Estos actos los hace uno, este acto lo hace el otro. Y hasta el domingo mismo, el domingo, este que les habla le firmaba un escrito pidiéndoles nuevamente, por favor, que se unan. Si no, no vamos a ningún lugar. La división no ayuda absolutamente a nadie. Y es complicado para esta administración decidir. Pero al final, si no se ponen de acuerdo, vamos a tener que decidir. Y vamos a tener que tomar una medida. Y tenemos que pensarlo. Si en cada año lo organiza alguien, si uno se hace cargo de una fiesta y otro de otra fiesta, pero yo creo que ese camino de una decisión por parte de la administración no es la correcta. Deben hacer del consenso y nosotros le seguimos invitando a esa unidad.
P.- ¿Y Lomo Magullo?
Lomo Magullo, ¿qué es lo que ha pasado? El Ayuntamiento de Telda y los vecinos han asumido la fiesta y se han desarrollado con normalidad. ¿Dónde está el problema, por llamarlo de alguna manera? Que la Traída del Agua es una marca registrada. Por lo tanto, nadie puede hacer uso de ella más allá que quien la registró que es el patronato de fiesta. Es decir, son ellos los que lo pueden utilizar, por mucho que el Ayuntamiento quiera. Por mucho que este alcalde tenga voluntad, no vamos a poder desarrollar la Traída del Agua con esas características y con ese nombre, porque es una patente y está registrada. Por lo tanto, no la podemos hacer. Se convocaron elecciones, al parecer, nadie se presentó y el patronato no cede los derechos y por lo tanto no se puede organizar. Todo el resto de actos se ha organizado con normalidad, pero nosotros no podemos llegar a la Traída del Agua. Yo creo que existe todavía un año para trabajar, para que los vecinos y vecinas se animen a acoger ese liderazgo del colectivo y el próximo año recuperar la Traída del Agua. El resto de actos se ha demostrado que se ha podido desarrollar con normalidad, con el dinero de los vecinos y sobre todo con el compromiso de artistas locales. Estamos hablando de Maestro Florido, estamos hablando de Charco Hondo, estamos hablando de empresarios de la zona, que sin cobrar un duro, están apostando por la fiesta. Eso se llama compromiso y ese compromiso lo muestra en las vacas flacas, como se suele decir, y cuando las cosas no van bien. Y eso es altura de mira y es lealtad a la ciudad y lealtad a su barrio. Por lo tanto, han demostrado esa profesionalidad y que son hijos con orgullo de un barrio. Por lo tanto, el agradecimiento pleno, a la Traída del Agua no podemos llegar, porque evidentemente está registrada. Pero el resto de actos han tenido una buena respuesta y han estado los vecinos, porque al final las fiestas son del pueblo y que a nadie le quiten lo bailado, como se suele decir, y que disfruten de la fiesta.
ACFI PRESS