El Palacio de Buckingham confirmó que Su Majestad la Reina Isabel II ha muerto pacíficamente a los 96 años.
En el comunicado oficial se informó que el Rey y la Reina Consorte permanecerán esta noche en el Castillo de Balmoral, en Escocia, y volverán a Londres mañana.
08/09/2022
La monarca, que reinó durante los últimos 70 años, supo mantenerse fiel a la corona, anteponiendo sus deberes como reina por encima de los diferentes escándalos familiares que en algunos momentos amenazaron seriamente a la institución. Además, logró que la monarquía se adaptara a los nuevos tiempos sin perder su esencia y carácter solemne.
Isabel II ha muerto rodeada de sus hijos y nietos, que se han desplazado de urgencia hasta el castillo escocés después de que los médicos mostraran su preocupación por el estado de salud de la soberana. Su fallecimiento supone el ascenso al trono de su primogénico, Carlos, de 73 años, que se encuentra en Balmoral acompañado de su esposa Camilla, duquesa de Cornualles.
También han acudido a Escocia el resto de los hijos de Isabel II -Ana, Andrés y Eduardo-, así como el príncipe Guillermo, primero en la línea de sucesión, mientras que el hermano de este, Enrique, también viaja hacia Escocia para reunirse con el resto de la familia real, ya que se encontraba en Londres para un compromiso benéfico.
La salud de Isabel II se había deteriorado notablemente en las últimas semanas, aunque el martes recibió a la nueva primera ministra británica, Liz Truss, a quien encargó la formación de un nuevo gobierno. En la foto divulgada tras la reunión se pudo ver a la soberana sonriente, pero muy delgada y con un bastón en la mano.
El miércoles, la soberana suspendió por recomendación médica una reunión 'on-line' de su Consejo Privado, formado por funcionarios y políticos que le asesoran.
Desde el fallecimiento de su marido, el duque de Edimburgo, en abril de 2021, Isabel II había restringido notablemente sus apariciones públicas debido a su estado de salud. En octubre pasó una noche ingresada en el hospital por una enfermedad que no fue especificada, aunque sus médicos siempre justificaron sus ausencias en los diferentes actos por "problemas de movilidad", lo que llevó a que su hijo Carlos y su nieto Guillermo asumieran parte de su agenda.
Así sucedió en mayo de este año, cuando el príncipe Carlos pronunció el discurso en la apertura de la sesión parlamentaria, uno de las citas ineludibles para la monarca. También fue destacada su ausencia de Isabel II en la mayor parte de los actos de celebración del Jubileo de Platino, como conmemoración de sus siete décadas al frente de la Corona, aunque sí reapareció por sorpresa desde el balcón de Buckingham Palace para clausurar el evento.
Nacida en Londres el 21 de abril 1926, Isabel II ascendió al trono a los 25 años de edad tras el fallecimiento de su padre, el rey Jorge VI, el 6 de febrero de 1952. Tras guardar un año de luto, fue coronada en 1953 en una ceremonia que fue retransmitida por televisión por primera vez en la historia.
Llegó al trono en un momento delicado, en el que el Reino Unido tuvo que afrontar las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial, incluyendo el racionamiento de alimentos, y la pérdida de sus colonias, lo que le relegó a un papel secundario en el panorama internacional frente a las nuevas potencias, Estados Unidos y la Unión Soviética.
Aunque la reina siempre ha gozado de una gran popularidad, también ha tenido que afrontar importantes reveses, como la separación en 1992 de los príncipes de Gales, Carlos y Diana, y de los duques de York, Andrés y Sarah Ferguson, en lo que calificó como 'annus horribilis'.
Y, sobre todo, la muerte en 1997 de Diana de Gales en un accidente de tráfico en París, que levantó la controversia por el silencio que guardó la reina sobre esta tragedia. Finalmente, un discurso de Isabel II lamentando el fallecimiento de la abuela de sus nietos -a quien calificó de 'ser humano excepcional'- zanjó la polémica.
En los últimos años, la institución se ha visto afectada por una serie de escándalos, como las acusaciones de abusos sexuales a una menor contra el príncipe Andrés, que se resolvieron con un acuerdo extrajudicial, o las denuncias de racismo hacia la Casa Real por parte de los duques de Sussex, Enrique y Meghan, que fijaron su residencia en Estados Unido tras apartarse de la monarquía. Pese a ello, su figura se ha mantenido incuestionable y con una alta estima por parte de los británicos.
Casada en 1947 con Felipe, duque de Edimburgo, la pareja tuvo cuatro hijos, ocho nietos y doce bisnietos. El mayor de ellos, Carlos, de 73 años, ha heredado el trono con la muerte de su madre; el príncipe Guillermo es el primero en la línea sucesoria y el hijo mayor de este, el príncipe Jorge, es el segundo.