Meri Pita |
Ante la abrumadora campaña mediática puesta en marcha contra PODEMOS por parte de determinados medios de comunicación, centrada en los últimos meses en dar una visión interesada de lo que sucede en nuestra organización, he decidido escribir esta carta a todas las personas de Canarias inscritas en PODEMOS. Mi intención es que conozcan la información que las televisiones, la prensa escrita y las radios del poder no cuentan sobre la supuesta crisis que vivimos en las Islas. Después, que cada cual saque sus propias conclusiones.
Meses antes de las elecciones de mayo de 2015 los partidos de izquierdas de Canarias asistieron a un hecho insólito. Tras muchos años de batalla en las calles y las instituciones había nacido PODEMOS, un movimiento social y político que en poco tiempo agrupó a muchísima gente, barruntando la posibilidad de poner por primera vez en jaque al Régimen del 78 en unos comicios. Sin embargo, este esperanzador panorama no fue tomado de la misma manera por todos los sectores que compartían con nosotras el deseo de transformar la realidad del Archipiélago:
Hubo gente que comprendió enseguida que la apuesta de PODEMOS pasaba por construir una nueva mayoría, y que se comprometió sinceramente con el proyecto, participando activamente en los círculos, trabajando en los consejos ciudadanos, sacando adelante presentaciones, charlas y actos de campaña, e incluso presentándose a las elecciones.
Otras personas valoraron positivamente nuestra aparición, pero decidieron continuar trabajando por el cambio desde la trinchera de sus respectivas organizaciones y partidos políticos, tratando a PODEMOS de igual a igual, y manteniendo actitudes respetuosas con la identidad de cada formación y su estructura interna. Estos son los casos de movimientos sociales como la Plataforma por la Defensa de las Pensiones Públicas, la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético, además de partidos políticos como EQUO e Izquierda Unida.
En último lugar estaba Sí se Puede, una fuerza que vivió con gran inquietud la aparición, crecimiento y consolidación de PODEMOS. Un partido que antes de mayo de 2015 solo tenía implantación en unos pocos municipios de nuestra tierra, y que después de esta fecha logró obtener representación en varios ayuntamientos, cabildos insulares y también en el Parlamento de Canarias.
Centrándome en este último caso, creo que es una obviedad que la llegada a las instituciones de miembros de esta formación solo fue posible gracias a su presencia en PODEMOS. Una presencia que nosotras aceptamos a cambio de que Sí se Puede se integrase totalmente en nuestro proyecto político hasta funcionar como una sola organización. Luego, es normal que muchas de las personas inscritas en PODEMOS perciban con desconfianza las acciones de un colectivo que dice una cosa y luego hace la contraria, de un partido que no quiere ser PODEMOS, pero tampoco dejar de serlo.
Ha llegado la hora de asumir la realidad. Compañeros y compañeras, Si se Puede nos ha mentido. Este partido ha utilizado nuestra formación como un trampolín para encaramarse a las instituciones, y una vez alcanzado este propósito, su siguiente objetivo era hacerse con las riendas de PODEMOS. Y si no lo han conseguido ha sido gracias al trabajo y la honestidad de la gente que ha comprendido que PODEMOS es un proyecto mucho más amplio, concebido para sumar mayorías y no para reproducir viejas luchas de poder.
Solo por eso algunos de sus miembros le han declarado la guerra a PODEMOS. La guerra desde dentro, instrumentalizando los consejos ciudadanos en los que están presentes. Y la guerra desde fuera, trabando peligrosas alianzas con los medios de comunicación al servicio de la vieja política para trasladar una visión irreal de lo que sucede en nuestra organización con la esperanza de debilitarnos día a día, más y más.
Para resolver el problema, hemos solicitado a Si se Puede en reiteradas ocasiones un encuentro en el que se aborde el problema de la doble militancia; el hecho de que en la estructura interna de PODEMOS haya personas que deban obediencia a dos partidos a la vez. Hemos tratado con compañerismo a los cargos electos provenientes de dicha formación, haciendo el esfuerzo de propiciar su integración en PODEMOS a base de trabajo. En definitiva, hemos hecho cuanto ha estado a nuestro alcance como organización para que se sintieran cómodos y cómodas, obteniendo como única respuesta todo tipo de descalificaciones y ataques constantes. Pero estoy convencida de que pronto estos problemas van a acabarse.
Si se Puede ha anunciado la creación de una promotora para facilitar su implantación en todo el Archipiélago, y ha convertido el congreso nacional en el que sus militantes debían refrendar la decisión de integrarse en PODEMOS en un evento pensado para consolidar su crecimiento como una fuerza autónoma, distinta a PODEMOS.
Ante esta nueva realidad, creo que ha llegado la hora de superar el falso debate que se ha generado acerca del futuro de un partido que por fin ha decidido lo que quiere y lo que no. Y está claro que lo que no quiere es formar parte de PODEMOS, una organización joven, que comete errores, pero que también madura y aprende, que está llena de gente a la que le gustaría dedicar todas sus energías a mejorar las condiciones de vida de las personas que viven en Canarias, que quiere actuar como correa de transmisión de las demandas ciudadanas, y abrir nuevos espacios para la participación, sin que intereses ajenos vuelvan a robarnos el tiempo y la calma.
Se nos viene encima una etapa muy dura. Vuelve a planear sobre nosotras la amenaza de nuevos recortes sociales, la aprobación de leyes al servicio de una minoría y la aplicación de reformas que harán crecer las desigualdades, y todo ello en un país donde la corrupción se ha convertido en norma y los poderes públicos actúan como si fueran comisarios políticos.
Vamos a necesitar de toda la inteligencia, de todo el entusiasmo y toda la fuerza de las personas que sentimos PODEMOS como la mejor herramienta para seguir defendiendo nuestro programa político en las instituciones y en las plazas, para construir una Canarias más justa y sostenible, más libre y al servicio de toda nuestra gente.
Luchar, crear, poder popular.
Meri Pita Cárdenes
Secretaria General de PODEMOS-Canarias