El joven estudiante de primero de informática en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria ha confesado el crimen, explicando que la había matado en un ataque de ira, porque ella se había quejado por el ruido que hacía con su ordenador y no le dejaba estudiar para un examen.
Además la Policía Nacional tenía pruebas de que el joven había estado en la vivienda de la víctima.
No se descarta un reconocimiento médico y psicólogico para determinar un posible trastorno mental.
La Policía Nacional detuvo a Alberto M. F. de 20 años, universitario, vecino de la víctima que vivía en el piso de abajo, como presunto autor de la muerte a golpes de la universitaria Saray González de 27 años, en la calle Pérez del Toro, (Arenales) de Las Palmas de Gran Canaria.
El detenido, se llevaba mal con Saray González porque esta le reprochaba que hacía demasiado ruido en su vivienda. Desde tiempo atrás habían discusiones frecuentes entre los jóvenes, por este motivo.
Este chico vivía con su padre, propietario del edificio donde residía Saray en régimen de alquiler.
Esta detención se produce 15 días después del trágico suceso, donde la joven universitaria de La Palmas, fue encontrado en medio de un charco de sangre, tras recibir fuertes golpes en la cabeza y después de haberse resistido.