Peregrinos de la Isla siguen fieles a sus costumbres y se dan cita en lo alto de Tirajana, en un oficio religioso donde el párroco hizo una proclama a la fe y el amor 
Con peregrinos llegados de la mayor parte de la Isla, la Plaza de Santiago amaneció ayer poblada de fieles, portadores de promesas particulares y que, una vez cumplimentaron al Santo Apóstol Santiago participaron luego de la tradicional ceremonia religiosa en el templo de Tunte. Antes de eso, muchos habían pasado la madrugada camino a Santiago. Luego, sobre el caluroso mediodía, nueve ministros sacerdotales daban comienzo a la solemne ceremonia religiosa, entre ellos el reverendo vicario de la Zona Sur y párroco de San Fernando, Francisco González, mientras se encargó de oficiar el acto el párroco titular de San Sebastián de Agüimes, Miguel Lantigua Barrera.Las voces de los componentes de la Coral de Maspalomas se encargaron de hacer la apertura de la ceremonia mientras se iban sellando los bancos del templo de fervientes religiosos prestos a ser testigos de la homilía de Miguel Lantigua, que hizo una proclama al amor y a la fe, algo que escasea en los tiempos actuales.
El párroco de San Sebastián de Agüimes estableció paralelismo entre la celebración de una fiesta y el sostenimiento de creencias religiosas, apelando a rescatar “muchas de las vivencias de fe que nos pueden aportar nuestros mayores”, haciendo mención a las costumbres de rezo. El párroco oficiante instó a “tratar de recuperar esos valores de nuestros mayores, en una sociedad en la que Dios ha pasado a estar ausente”. Hizo referencia al santo al que se veneraba: “Santiago perteneció al grupo de privilegiados y más cercanos a Jesús, y hay que imitarle siendo apóstol a diario para mantener viva la fe”.
En el cuerpo central de la homilía, Miguel Lantigua propuso la búsqueda de la alegría y la felicidad “a través del Evangelio en un mundo en el que se desconfía de la palabra”. Finalmente, el sacerdote oficiante hizo una proclama a “no dejarse llevar por la tiranía, intenten amar”.
Ofrenda y procesión
En el tramo final del oficio religioso, fieles del municipio realizaron varias ofrendas como parte del acto de la Santa Misa, mientras la temperatura en el interior del templo iba subiendo algunos grados.En el acto religioso y la posterior procesión se dio cita la mayoría de la Corporación de San Bartolomé de Tirajana, con representaciones del Cabildo de Gran Canaria y los municipios de Tejeda, Teror, Santa Lucía, Mogán y Firgas, estos dos a través de sus primeros mandatarios, Onalia Bueno y Manuel Báez, respectivamente. También representantes de las fuerzas del orden estuvieron, destacando la presencia del eurodiputado alemán Hans Werner Kammer, del CDU, y uno de los políticos de máxima confianza de Angela Merkel.
Acompañado de muchos fieles, la imagen de Santiago Apóstol recorrió en procesión las principales calles de Tunte, para recibir en la puerta del templo los honores finales del cuerpo de zapadores de Infantería de Marina y la banda Pequeña Estefanía.
