Fotos de Lucre Melián |
San Bartolomé de Tirajana, que investiga la procedencia de la nube de polvo, solicita a los propietarios de terrenos colindantes permiso para levantar una barrera verde con tuneras y casuarinas que alivie el problema de los vecinos.
El Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana ha solicitado a los propietarios de los terrenos colindantes con la urbanización residencial Montecastillo permiso para levantar una fornida barrera vegetal destinada a contrarrestar los efectos adversos del polvo y tierra en suspensión que están afectando a los vecinos de Castillo del Romeral.
Esa barrera verde se llevaría a cabo a lo largo de toda la calle Tambor con plantaciones de tuneras y 300 casuarinas equisetifolias. Las tuneras se plantarían en una franja de terreno de dos metros, y a continuación la arboleda a modo de seto en una franja de 11 metros.
Además, también se pretende levantar un muro o pretil de un metro de altura justo en el borde exterior de la acera de la misma calle Tambor, revestido de piedra, y repoblar el bosquecillo-barrera de casuarinas del lateral este de la urbanización, en el lado de la central eléctrica, con la plantación de otros 50 nuevos ejemplares.
Para poner en marcha la barrera verde, el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana sólo está a la espera de la respuesta a la solicitud de autorización en precario que la Concejalía de Servicios Municipales, Ordenación del Territorio y Políticas Ambientales, dirigida por Fernando González Montoro, le formuló a los propietarios del suelo el pasado 10 de junio.
Desde Las Rosas
En relación a este mismo asunto, en el último pleno celebrado por la Corporación municipal el pasado viernes, día 24, el alcalde Marco Aurelio Pérez Sánchez explicó que el Ayuntamiento está colaborando con los vecinos para mitigar el problema e intentando descubrir la procedencia de la tierra en suspensión.
El alcalde informó que el Ayuntamiento ya ha puesto el problema en conocimiento del Seprona y también de la Agencia de Protección del Medio Urbano y Natural, y también que cada vez que los vecinos alertan al Ayuntamiento los técnicos suben hasta la curva de la carretera de Los Cuchillos -por la importante perspectiva que ofrece de todo el sureste- “y se comprueba que la nube de polvo es bastante amplia, porque va desde la zona de la gasolinera de la autopista, en Las Rosas, hasta El Castillo y Juan Grande”.
Marco Aurelio Pérez sostiene que, además del viento imperante casi de continuo en toda la zona, es probable que también esté afectando el paso del ganado y la enorme sequedad y volatilidad de los suelos de cultivo ahora abandonados.
Santa Lucía
El alcalde también informó al pleno sobre el resultado de la colaboración mantenida sobre este asunto con el Ayuntamiento de Santa Lucía, donde los vecinos del Castillo, pensando que el terreguero podía provenir de la machacadora de áridos del Barranco de Tirajana, presentaron el pasado 27 de abril un escrito solicitando una detección de las causas que originan la nube de polvo y la adopción de medidas oportunas para remediarla.
El servicio municipal de Salud Pública de Santa Lucía realizó 7 visitas de inspección entre el 4 y el 20 de mayo a las instalaciones de tratamiento de áridos en Casa Santa, en la desembocadura del Barranco. Concluyó el 8 de junio pasado que las emanaciones del polvo producto de la actividad y del trasiego de camiones y tractores es “de escasa entidad”, incluso en los días de mucho viento, por lo que “el polvo generado en la zona no puede considerarse un problema de Salud Pública”.