Así se prepara el personal sanitario ante posible caso de ébola.


Un estricto protocolo que va desde los trajes especiales, hasta la retirada del material contaminado para evitar contagios.
Lorena Díaz | Luis Pablo Morales  |  Canarias  | Actualizado el 07/10/2014 a las 17:33 horas

Sin terminar de ponerse la equipación completa está prohibido acceder a la habitación donde se encuentra el paciente.
Mono, bata impermeable, máscara con la más alta filtración, calzas cubrebotas y doble guante. Triple si se van a recoger muestras del paciente, y todo bajo un estricto orden de vestimenta y siempre con la supervisión de un compañero.
Una mascarilla estanco que evita contaminación por la mucosa de los ojos.
Más protección de la que exige la Organización Mundial de la Salud.
El personal debe pasar por áreas diferenciadas, contaminada y limpia, dotadas de exclusas de limpieza donde se dejan los residuos del paciente.
Para luego en otra sala retirarse los monos de trabajo.
Un enfermo que estará monitorizado vía webcam para evitar las frecuentes entradas a la habitación, de producirse una emergencia no podrá accederse hasta de nuevo haberse equipado completamente.

Medidas extremas que continúan si el paciente fallece ya que es uno de los momentos críticos de contagio.