El Ébola se acerca peligrosamente a Mauritania y Marruecos, países que son la puerta de España y Canarias para los inmigrantes subsaharianos.
Por Jaime Rubio Rosales
El virus del Ébola nace en Congo y Sudan en 1976, producido por los murciélagos, a los que no les afecta. Estos se los transmiten a los monos que se comen los naturales de esos países, pasando el virus al ser humano. Pero en estos momentos ha avanzado hacia el Norte de África y se encuentra a las puertas de Mauritania, es decir, en Mali, Guinea Conakry y Liberia. El peligro de este avance es que, hasta ahora, el Ebola se localizaba en pequeñas aldeas, fáciles de aislar. En cambio, ahora se encuentra en núcleos de población mas grandes, ciudades que son focos de inmigrantes, caso de Guinea Conakry. Teniendo en cuenta que este virus es de fácil contagio, el peligro de propagación se ha multiplicado por cien al encontrarse en países cercanos a Senegal, Mauritania y Marruecos.
Recordemos que el Ébola es un virus mortal al no existir tratamiento ni vacuna, que se manifiesta con hemorragias internas y externas, diarrea con sangre, fiebre y fuertes vómitos. Lo peor de todo es que la única forma de evitar el avance del Ébola es el aislamiento, cosa difícil en países como Mali o Guinea por los grandes movimientos de personas en esos países y el desconocimiento del por los equipos médicos. El pasado febrero un equipo medico se encaminaba a la ciudad de Macenta, en Guinea, a tratar varios casos de diarrea si saber a lo que se enfrentaban. A los pocos días todo el equipo médico ya estaba contagiado del Ébola, muriendo casi todos ellos.
Si no queremos que el Ébola se convierta en la Peste del Siglo XXI hay que observar qué está pasando con nuestros vecinos e ir tomando medidas preventivas con el personal que viene de esos países del África Occidental, el nuevo escenario del Ébola.
El Ébola se acerca peligrosamente a Mauritania y Marruecos, países que son la puerta de España y Canarias para los inmigrantes subsaharianos.