El Gran Circo en las carrozas de Santa María de Guía.




El Jefe de Pista lo anunció pasada las diez de la noche:  El Gran Espectáculo hará su aparición por la calle Médico Estévez, y así fue.
Un año más, la gran cabalgata de carrozas de las fiestas de La Virgen de Guía volvió a deslumbrar al numeroso público que se congregó en las inmediaciones de la iglesia, con el espectáculo de Circo que  hizo las delicias de  grandes y pequeños.
El grupo de majorettes del colegio Nicolás Aguiar, abrió el espectáculo, y detrás, la Batukada del CEIP de La Dehesa calentó el ambiente, para dar paso a un grupo de payasos, y pequeños malabaristas y trapecistas.
Tras ellos, la primera carroza, con los payasos Giuseppe y Traca, que anunciaban su boda y que actuarían como maestros de ceremonia.
El espectáculo siguió con unas hermosas Domadoras de perros y con la carroza de la Magia, en la que no faltó el dulce y gigantesco conejo, que llenó de ilusión la noche guíense.
Las gimnastas del Club Agádir dejaron al público con la boca abierta, y la carroza de los equilibristas asombró al público asistente.
Los zancudos  sembraron de fantasía las calles del casco guiense a su paso ,y la carroza de los malabaristas impresionó con las pelotas pasadas de mano en mano a una velocidad vertiginosa.
No faltó el Domador de leones, que terminó siendo domado por el simpático león que resultó ser muy inteligente, y la carroza de los enormes elefantes deslumbró por su belleza.
El nutrido grupo de Papagüevos, acompañados por la Banda Gran Canaria, cerró el gran espectáculo del Circo de Santa María de Guía, poniendo fin a una noche de fantasía e ilusión que dejó muy buen sabor de boca.