La pregonera de El Pajar 2012 retrata la vida del barrio marinero en los ‘90.

María Elena Álamo Ojeda ofrece una completa crónica del pueblo y sus gentes, durante el último cuarto del pasado siglo. 

 El alcalde de San Bartolomé de Tirajana, Marco Aurelio Pérez Sánchez, ofició este  viernes la apertura de las Fiestas Patronales de El Pajar de Arguineguín, que los vecinos prolongarán y disfrutarán en honor de Santa Águeda hasta el domingo 22.

En esta edición el arranque festivo congregó en la plaza de este barrio a un público numeroso, expectante ante el pregón que leyó la polifacética bailarina y actriz publicitaria criada en este enclave marinero María Elena Álamo Ojeda, quien aceptó el gesto de confianza depositado en ella por la comisión de fiestas nuevamente presidida por Mariano Trujillo Cazorla.

El pregón de la joven María Elena consistió en un retorno a sus orígenes, en un “bonito e ilusionante” viaje a los recuerdos a través de los nombres y las anécdotas que forjaron su infancia de vida en “este entrañable pueblo”, dijo.

En su discurso, de casi 20 minutos, Elena Álamo dibujó con palabras sencillas y cargadas de emoción las madrugadas de radio junto a su padre en la antigua carretera del Sur para trabajar en la fábrica de cementos, y la amorosa custodia femenina que le ofrecieron de niña su abuela Adelina y sus bisabuelas y tías bisabuelas Juana, Lucinda, Julia, Mariquita y Carmita. Todo un mundo de mujeres que cimentaron y forjaron su formación.

El recuerdo contenido de la pregonera hizo que el público se trasladara a su infancia de juegos, a espacios concretos dentro del pueblo y sus alrededores, y que recuperara con meridiana nitidez la imagen de personajes del barrio todavía vivos o ya muertos, a los que honró con su memoria.

En su discurso afloraron su amiga Daida; la casa de Sindo y Ana; Carmina Zerpa; Juanita y su carretilla cargada de piñas de plataneras para los animales; “la mejor playa del mundo y del extranjero” donde jugaba a peluquera con las algas; los hijos de Manolito ‘El Tufia’; Carmen, Fany, Lola, Erika; sus tiradas marinas desde la Piedra Santa y desde el risco para nadar y margullar hasta La Bajeta; su colección de caracolas; su pertenencia a los equipos ganadores de José Ángel Ortega; los silbos de Elías y las fiestas veraniegas y cursillo y talleres que se organizaban en el Teleclub; las monjitas “que no envejecen y siempre tan alegres y sonrientes haciendo paños con puntos de cruz”; la tienda de Juanito; la libreta de la compra de su tía Juana y el agua fresca de su pila; sus amigas Nazaret Peña, Yesica Martel, Nereida Alonso y su tupé, Yaiza Santana; la librería de Yaya; el derrumbe de las casas viejas y la construcción de las nuevas; los juegos de oficinistas, el boliche y las chapas; las comelonas en el Tanque Inglés y las fiestas de pijama en la casa de Fefa Peña; su profesor Don Francisco, que le encomendaba la escenografía del Carnaval del colegio, el diseño de los disfraces y hasta el decorado del escenario… “Me lo tomaba tan en serio que incluso me encerraba en la habitación de mi tío Chachule para visionar Cabaret, Grease y Fama para luego montar los musicales del colegio”, afirmó.

Pequeños detalles

La lista de momentos, anécdotas y nombres que esgrimió la pregonera remontó a los vecinos que la escucharon a la época dorada del barrio en los 80 y 90.  Recordó a Ingrid, su primera profesora de danza; los espectáculos con Jose Daniel y María Victoria; sus coreografías con Nazaret en las verbenas con Armonía Show y Paco Guedes; y rememoró también a Margarita Jiménez ‘Yaya’, Lucia Álamo, María Victoria y Lolina; sus memorables partidos de fútbol femenino; sus clases de ballet con Corina o de órgano junto a Teleimas y Nadia en el Barranco de La Verga; a Santi Almeida; la I Escuela de Danza de Santa Águeda y a su“admirable amiga” Nazaret Ortega; la tienda de su madre Carmensona y su amiga Ana Déniz, con las que aprendió a detallar los empaquetados de regalos; Teresa Negrín, Pimpina, Agustina Negrín; las gracias de Jorgito Zerpa y su moneda de 100 pesetas pegadas a la frente; los trajes del Carnaval Internacional que cosían su madre, Yaya, Eulogia, Chenchi, Carmencita, Carmela, Susana y las gemelas Águeda y Mari Pino… El asadero de pescado de las fiestas; los famosos bares El Boya y El Playa; Mari Pino Pérez; Juanito; Eladio … “Ni se imaginan lo que todos estos pequeños detalles han influido en mi vida”, dijo.

Tras recordar la libertad de su perra Pazky chapoteando entre las olas y revolcándose en la arena de la playa, la pregonera pidió a los vecinos que inculcaran a los más pequeños el amor por el pueblo, a participar en todas las actividades que se organizaran en el barrio y a respetar y aprender de los mayores.

El programa de estas fiestas de El Pajar contempla para este sábado el concurso de pesa a caña en la Avenida, con premios para la pieza mayor y también para el mayor número de capturas; y la romería y posterior ofrenda a la Virgen de Santa Águeda. La jornada finalizará con una verbena a cargo de Armonía Show y Güira Latina.

Este domingo se disputa el torneo masculino de zanga, organizado por el exfutbolista de la Unión Deportiva Miguel Ángel Valerón, y tendrá lugar también el V ‘Encuentro con nuestra gente’, con proyecciones de vídeos sobre la vida y la gente del barrio, representaciones teatrales y musicales.